martes, enero 22, 2008

El lado oscuro del corazón (Eliseo Subiela-1992)

"No se me importa un pito que las mujeres tengan los senos como magnolias o como pasas de higo; un cutis de durazno o de papel de lija. Le doy una importancia igual a cero, al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco o con un aliento insecticida. Soy perfectamente capaz de soportarles una nariz que sacaría el primer premio en una exposición de zanahorias; ¡pero eso sí! —y en esto soy irreductible— no les perdono, bajo ningún pretexto, que no sepan volar. Si no saben volar ¡pierden el tiempo las que pretendan seducirme!""
Díganme cursi, bohemío o hasta mamila, pero que bonito sería que la poesía pesara tanto en la vida cotidiana como en esta película; no soy para nada un conocedor de la métrica del verso, ni de autores y poetas mucho menos me sé de memoria alguno; pero tampoco soy de palo y cuando las palabras significan lo de que deben y osan ir más allá para transformarse en cosas que no son, entonces sentimos como las fibras del cuerpo se mueven, se rompen, se doblan.
Como cuando encuentras a esa persona que vuela, esa que te hace volar, esas contadas ocasiones en que el subconsciente le dice al cuerpo "aquí te quedas", a veces no le hacemos caso y nos arrepentimos de haber presionado el botón de expulsión sobre el buró; a veces las cartas caen de tal manera que aunque uno quiera la suerte ya está echada; y es cuando uno de verdad disfruta el difícil y complicado mundo de las relaciones interpersonales.
Pero creo que más allá de la primera capa, esta película no habla sólamente del amor y su eterna búsqueda, sino de la sensibilidad que debe permanecer a flor de piel; que tal sería pagar los tacos con un poema, hacer sonreir a la de al lado con unas palabras, obtener una caricia o un beso por el sólo uso de la labia, de la palaba sincera, sin promesas falsas ni pretensiones, sino simple y puro sentimiento.
"Yo, por lo menos, soy incapaz de comprender la seducción de una mujer pedestre, y por más empeño que ponga en concebirlo, no me es posible ni tan siquiera imaginar que pueda hacerse el amor más que volando."

3 comentarios:

Tristán dijo...

Échale el lente a "Linea arbitraria se distiende", en la Lumbre Culebra, pues.

Anónimo dijo...

"pies para que los quiero , si tengo alas pa' volar"... Frida Kahlo.
No te creas, aveces por volar es muy dura la caida, y necesitas de alguien que te enseñe a querer volar de nuevo...

Anónimo dijo...

en hora buena,, enseñame a volar,
que las alas se me entristecen,y no caben en mi buro será que en el tuyo si???